El despido objetivo requiere de algunas características para que sea válido y no se considere improcedente. Depende de cada tipo de despido las medidas que hay que llevar a cabo. Las causas que se tiene que dar para el despido objetivo son:
- Situación económica: la empresa debe tener datos que justifiquen una mala salud económica por la que se justifique el despido.
- Causas técnicas: informatización o desarrollo tecnológico que suponga un desarrollo de la tarea que en ese momento realizaba la persona.
- Causas organizativas: cambios en sistemas de trabajo, fusión de varios departamentos o cierre de alguno.
- Causa productiva: pérdida de demanda sostenida en el tiempo de la producción de algún bien o servicio.
Procedimientos:
- Carta de notificación al empleado donde se expone el motivo del despido.
- Indemnización de veinte días de salario por año de servicio, prorrateándose por meses los periodos de tiempo inferiores al año y con un máximo de 12 mensualidades.
- Preaviso de 15 días desde el día que se notifica hasta la fecha de extinción de contrato.