El contrato de adhesión, a diferencia de lo que ocurre con la mayoría de contratos, es un contrato elaborado únicamente por una de las partes que lo subscriben o firman. Esto significa que la otra parte sólo tiene dos opciones: o aceptar el contrato de adhesión o rechazarlo por completo.
Un ejemplo claro de contrato de adhesión son los conocidos popularmente como «contratos de suministro de servicios públicos» como el del agua, luz, telefonía, pero no son los únicos. También responden a este tipo de contratos la mayoría de los seguros y bancos. Es decir, es uno de los más frecuentes pero que menos se leen entre los consumidores. Además, aunque es en el ámbito en el que son más comunes, también es posible que se celebre entre particulares, dando forma a lo que se conoce como el contrato de adhesión entre particulares.
Este tipo de contrato es uno los más polémicos porque una de las partes firmantes no puede negociar ninguna de las cláusulas que lo componen. Por este motivo se dice que existe una desigualdad evidente de una de las partes en los contratos de adhesión y puede llegar a darse el caso de que existan cláusulas abusivas. En algunos países, como por ejemplo en México, existen modelos de contrato de Adhesión tipo elaborados por el PROFECO de tal manera que un proveedor es capaz de elegir el que más se ajusta a sus necesidades.
Características del contrato de Adhesión
Para que un contrato de adhesión se considere válido debe cumplir los siguientes requisitos o tener incluir las siguientes condiciones generales:
- El contrato de adhesión debe incluir todos los datos del consumidor y estar firmado por éste.
- Debe quedar constancia de las cláusulas por las que se rige, quedando incluidas en el mismo documento o bien en un anexo.
- No puede incluir ninguna cláusula abusiva así considerada por la ley.
Si lo deseas, también puedes descargar de forma gratuita un modelo de contrato de adhesión.
-- Publicidad --